Puedes pasarte dias y dias paseando por Toledo y descubrirás cada día nuevas maravillas, es curioso que con todas las veces que he hecho mis recorridos, todavía me quedan cosas por descubrir.
Encontrarás mas de 1.000 fotos de la ciudad
En Toledo, un cobertizo es una construcción a cierta altura, que sirve
para comunicar dos edificios. Hace siglos era una forma de evitar salir a
la calle, pero fueron prohibidos en tiempos de Juana I de Castilla,
desapareciendo muchos de ellos. Os contamos dónde localizar los que
quedan. Así son los cobertizos de Toledo. Bibliografia: leyendasdetoledo.com
Toledo ha contado con una muralla desde los romanos, que tuvo que ser
reconstruida por el rey visigodo Wamba en el 674. La muralla actual es
de origen árabe donde podremos encontrar algún resto romano. Al rey Alfonso VI, se le otorga la finalización de las obras de la muralla en el 1085, tras reconquistar la ciudad. Toledo siempre ha contado con una gran muralla muy conocida a lo
largo de su historia tomando protagonismo sus puertas de entrada y
salida, tales como la puerta de Bisagra, la de Alfonso VI o la del
Cambrón. Bibliografia: toledoguiaturisticaycultural.com
Del convento de Sta. Fe hay constancia, documental y arqueológica, de
diversos momentos constructivos que atestiguan su existencia desde el
periodo islámico. Se asienta sobre una parte de los palacios de las
taifas mandados edificar por el monarca al-Ma´mun en el S. XI. A raiz de
la conquista cristiana estos palacios fueron fragmentados, acogiendo a
diversas comunidades, siendo donado el espacio que ocupa este convento a
los caballeros calatravos en el 1.210 por Alfonso VIII.
El
Museo Taller del Moro ocupa parte de una casa principal de la nobleza
toledana del S. XIV y constituye el mejor ejemplo de arquitectura
palatina del periodo. El museo exhibe ejemplos de artes suntuarias
andalusíes procedentes de Toledo.
Guardan silenciosamente la huella del paso de los siglos y con ello
un trozo de la historia. Son un ejemplo único de arquitectura que a
menudo ocultan antiguas obras de arte. Son los cigarrales de Toledo.
Representan lo que las masías a Cataluña o los cortijos en Andalucía,
pero tienen un aura de misterio secular que ha suscitado la admiración
de Galdós, Unamuno o Lorca, entre otros, Una fría definición del cigarral toledano referiría que se trata
de amplios espacios urbanizables ubicados en las riberas del río Tajo,
que limitan con el sur del casco antiguo de esta ciudad y que están
habitados desde los siglos XVI y XVII. Blibiografia: https://www.elnortedecastilla.es
El edificio actual presenta una sucesión de reformas y estilos,
destacando el ábside mudéjar del siglo XIII, decorado con tres niveles
de distintas arquerías ciegas de ladrillo, Son añadidos los dos ábsides
laterales planos, cuando la iglesia triplicó su única nave original en
el siglo siguiente.
Más tarde se suman capillas góticas, en el siglo XVI la capilla de Santa
Catalina, de Nicolás de Vergara "el Mozo" y en el XVII la de Loreto,
obra de Jorge Manuel, el hijo de El Greco. Hubo obras de restauración
también en el siglo XX. Y, sin embargo, es una de las primeras
parroquias fundadas tras la reconquista, pues aparece documentada ya en
el siglo XII.
Su torre aprovecha la estructura de un alminar musulmán, como en la
iglesia de Santiago, en cuyas paredes aparecen reutilizados algunos
relieves visigodos, aunque menos que en la torre de la iglesia de San
Salvador.
Convento de Santa Isabel de los Reyes
El actual convento, fundado en 1477 por doña María Suárez de
Toledo, conocida como "Sor María la Pobre", tiene su origen en dos
palacios distintos, ambos mudéjares del siglo XIV y la iglesia de San
Antolín.
Se accede a la iglesia conventual, reconstruida durante el reinado de
Carlos I, a través de una portada de época de los Reyes Católicos
(1500). Es de estilo gótico y se cubre con artesonado de madera. En el
interior, nos encontramos un bello retablo del s. XVI en la nave de la
epístola. El retablo mayor está fechado en 1572, es de estilo plateresco y
presenta bellos altorrelieves y un gran número de tallas. A los pies se
construyó el coro de las monjas con un bello zócalo de azulejería, un
retablo plateresco y una sillería, todo ello del siglo XVI.
En la clausura existen cuatro patios, el de los Naranjos, de los Laureles, de la Enfermería y de la Demandadera.
Restaurado en fechas muy recientes, en 2006, ha sido recientemente abierto al público, convertida parte del edificio en museo. Blibiografia: Turismo-Toledo
Hacienda del Cardenal, próxima a todos los lugares de interés y asentada en uno de los entornos más bellos.
Levantada como “Quinta” de recreo, restaurando lo que fue un palacio
toledano de la época, a finales del siglo XVIII por el Cardenal
Lorenzana, es lo que hoy vemos como el hotel.
El hotel se encuentra en la parte alta del jardín. El zaguán coronado
con el escudo familiar Lorenzana, alberga la recepción del hotel y da
paso a un recibidor con techo de bañera al uso en la segunda mitad del
siglo XVIII.
Los pasillos vestidos con caminos de sisal distribuyen en dos plantas
las 27 habitaciones orientadas en su mayoría hacia el norte, encarando
el jardín, con ventanas imitando el lacado popular en blanco. A la
planta superior accedemos por una escalera cuya barandilla es del siglo
XVI, donde contemplamos una réplica de “Tormenta sobre Toledo”, antesala
del salón social de corte neoclásico, cuya chimenea es el centro de una
sala irregular donde podemos encontrar dos sillones de cordobán. Blibiografia:toledo-turismo